La eficiencia energética de los edificios es una prioridad en Europa para reducir el consumo de energía y la dependencia de combustibles fósiles hacia 2030 y 2050. Esto requiere rehabilitar edificios con mejores recubrimientos térmicos, aislamiento y sistemas de calefacción eficientes. El primer paso es una auditoría energética, y en España, la calificación energética de los edificios se puede consultar en la web edificioseficientes.gob.es. Este sitio ofrece un mapa interactivo donde se puede verificar la eficiencia energética de cualquier edificio.
Un ejemplo es el edificio del Ministerio de Transición Ecológica en Madrid, con una calificación C, mejor que la mayoría de la zona que tiene calificación E. A nivel nacional, un análisis de UCI muestra que el 87% de las viviendas en España tiene calificaciones E, F o G, lo que indica que necesitarán rehabilitación para cumplir con las directivas europeas.
Navarra, Castilla y León y Galicia tienen el mayor porcentaje de viviendas con certificación A, mientras que Canarias, País Vasco y Asturias tienen más viviendas con certificación G. En Cataluña, solo el 0,55% de los edificios tienen calificación A, con una mayoría en calificación E.
La eficiencia energética es medida por ingenieros y arquitectos mediante el cálculo del consumo energético teniendo en cuenta varios factores del edificio. Un edificio con calificación A puede reducir su consumo energético hasta en un 40 o 50%.
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