La rehabilitación mostró un crecimiento notable. Las viviendas visadas para gran rehabilitación aumentaron un 9,4%, alcanzando 37.783 unidades, el mejor registro en cinco años. Desde 2019, estas visadas han crecido un 48%. En detalle, la superficie visada para rehabilitación residencial creció un 9,9%, y la no residencial un 11,8%. En total, la superficie visada para rehabilitación alcanzó los 9.001.815 m², un aumento del 10,8% respecto a 2022 y del 27% respecto a 2019.
La presidenta del CSCAE, Marta Vall-llossera, destacó que aunque se han aprobado ayudas históricas para la rehabilitación, la crisis energética y la inflación han impactado en el sector. A pesar de estos retos, las consultas sobre rehabilitación aumentaron un 44% en 2023, indicando un interés creciente en rehabilitar viviendas de manera integral.
En cuanto a la obra nueva, se visaron 98.447 viviendas, un ligero descenso respecto a los últimos años. La superficie autorizada para obra nueva disminuyó un 5%, afectada principalmente por una caída del 7,2% en la superficie residencial, mientras que la no residencial creció un 1%.
A nivel regional, la superficie visada para rehabilitación aumentó en casi todas las regiones, excepto en Ceuta, Aragón, Castilla-La Mancha, Andalucía y Castilla y León. Por otro lado, la superficie para obra nueva disminuyó en la mayoría de las regiones, con algunas excepciones como Murcia y Cantabria.